Albert Gil es una de las figuras fundamentales en la trayectoria de Yeremay en el Deportivo. Figura clave en su llegada a A Coruña, el futbolista canario se despidió de él con pesar tras anunciarse su salida del club blanquiazul hace algunos meses. Las buenas palabras son mutuas y en Coruña Deportiva el catalán, afincado en Galicia, repasó cómo fueron los inicios del talentoso extremo como deportivista.
Su desembarco en Abegondo, todavía con 14 años, se produjo en un escenario complejo después de una dura etapa en la cantera del Real Madrid. «Conozco un poco la casa; es un lugar difícil para los jugadores y siempre hay que buscar la oportunidad», explicó Gil. Sin embargo, el directo de la cantera lo tenía claro: «Era un jugador extraordinario. Flaquito, descarado, gambeteador… Un jugador de otro nivel. Él viene con 14 años y era diferente. Diferencial en el uno para uno. Era muy diferente a lo que teníamos aquí».
Una vez fichado comenzó un proceso de adaptación en el que la lejanía con la familia siempre es un escollo. «Él vino aquí y nosotros somos los que tenemos que dar el cariño familiar, la educación que al final sus padres no pueden darle por la distancia. Intentamos ser lo más cercanos posibles y ayudarles en su formación, que es lo que en aquel momento garantizábamos», relata. Un problema que entre técnicos y compañeros hicieron más llevadero.
A partir de ahí todo fue sobre ruedas en el plano futbolístico, aunque tuvo alguna etapa con menos protagonismo, como la Copa de Campeones que ganó el equipo Juvenil a las órdenes de Óscar Gilsanz. «Tomamos una decisión difícil porque venía de ser campeón de España aunque no tuvo protagonismo en la final», confiesa Gil al relatar cómo fue su salto al primer equipo.
Un talento poco habitual
Durante su etapa en la cantera «siempre manifestó su talento», destacando como un «jugador diferencial» que empezó a hacerse un nombre en la ciudad. Con el paso del tiempo «te das cuenta que ese talento viene afianzado por su gran personalidad» hasta llegar a la conclusión de que «es un talento fuera de lo normal».