El Deportivo acabó ganando el sábado un partido que podía haber hecho mucho daño. El hecho de remontarlo y la comunión final con la afición pronto curaron la herida y Antoñito explica los beneficios de situaciones así: «Son partidos de los que hacen afición… aunque no sean buenos para el corazón. Pero sí ayuda a prepararse para los partidos importantes que vienen. La reacción del equipo fue brutal. Te viene un descendido, sin presión y los que estamos en este mundo sabemos que o te adelantas rápido y te activas, o lo pasas complicado. Pero son remontadas que gustan mucho dentro y fuera. Ganas autoestima. Encajas tres goles ante un rival de menor nivel, pero lo difícil es remontar tres veces durante un partido. Nos quedamos con lo positivo y con que todo el mundo sufrió y disfrutó».
El lateral jugó su primer partido completo con la blanquiazul y aseguró sentirse bien, «sin ninguna molestia», pero ya piensa en su regreso a Valladolid: «Es especial volver, claro. Saludaré a los compañeros que haya por allí y a la gente del club, pero luego son 90 minutos y los amigos se quedan en los bares. Voy defendiendo los colores del Dépor y a certificar ese segundo puesto. Los filiales son diferentes. Un día te salen perfecto y te pintan la cara o salen relajados y sin ganas, pensando en sus cosas de gente joven. Jugué tres años en los anexos y es un campo que me es familiar, para mí será incluso más fácil que jugar en Zorrilla».
Más allá del hecho de ganar fuera meses después, Antoñito cree que para el Deportivo es importante terminar con buenas sensaciones: «Acabar con cero derrotas en estos dos partidos daría confianza al grupo y al equipo. Vamos con esa idea. Sacar algo positivo, a ser posible los tres puntos para asegurar esa segunda plaza. Con la victoria, mucho mejor».
Antoñito y el playoff en Riazor para el Deportivo
Antoñito ve bien que el Deportivo pueda jugar el playoff en Riazor, aunque asegura que estarían igual de arropados en cualquier otro lugar: «Es positivo jugar en casa, claro. En Riazor estamos totalmente acoplados a las medidas. Pero ya se lo dije a algún amigo que me dijo que teníamos el tema a favor. Si hubiéramos jugado en Sevilla, hubieran venido 20.000 personas igualmente. Con la masa social que iba a tener el Deportivo, siempre iba a tener más que el rival. Eso es lo que cuenta».