Le tocó a Álex Bergantiños reflexionar sobre el mal momento que atraviesa el Deportivo. Mal momento, como apunta el capitán, en resultados, porque cree que el equipo ha merecido más: «Estamos afrontándolo con naturalidad. En Irún fue un partido en el que el rendimiento no fue el que reflejó el marcador. Pero este deporte es así. En los últimos encuentros estamos haciendo más méritos que puntos, pero hay que afrontarlo con tranquilidad. Sabiendo lo que hicimos mal y lo que hay que mejorar. Tenemos que tener una línea de estabilidad».
Precisamente, Bergantiños fue uno de los protagonistas en el error del primer tanto del Real Unión. Lo explica así: «El mayor error es que me sorprende la acción. No me esperaba que me dieran ese balón en ese tipo de acciones. Quizá debería hacer hecho el control hacia a fuera… fue la sorpresa de recibir la pelota y me marca el siguiente pase. Seguro que todos los que estábamos en la acción, si volviésemos a vivirla decidiríamos de forma diferente. Son errores del juego y hay que asumirlos. Es parte de nuestra idea también y cuando te equivocas puede penalizarte. Estoy dolido, porque les encauzó el partido, toca asumir errores y corregirlos».
También habló el coruñés sobre la mala racha y si hay temor a que aparezcan dudas. Para él, la situación ha cambiado con respecto al año pasado: «Creo que sí que es diferente. Influyen varias cosas. El formato de competición, que te hacía sentir todo más urgente, pero también la confección del club y de la plantilla. Es muy diferente. La gente que ha venido está acostumbrada a la categoría. A ganar y a perder. Saben que la importancia del Deportivo en la categoría es grande, pero al final la competición es la misma. Eso ayuda a que todo sea más natural. Cómo se gana, cómo se pierde… la gente lo tiene claro desde el principio».
Álex Bergantiños elogia la tranquilidad de Noel
Como capitán y canterano, Álex Bergantiños también sigue de cerca la evolución de Noel: «Lo que me tiene tranquilo con Noel es la propia tranquilidad que transmite él mismo. Hablas con él y lo ves. Yo intento transmitirle que ahora todo es bonito, positivo, con las estadísticas y cosas maravillosas; y lo merece porque rinde de manera excepcional. Pero lo más importante es que está entrenando con intensidad el cien por cien de los minutos. No se para. Los elogios no lo están parando y eso es lo más importante que puedes ver en un jugador de su edad. Tiene esa ambición de seguir, de aprender… y está con una predisposición excepcional».