El cuarto fichaje del Deportivo para la temporada 22/23 ha pillado totalmente por sorpresa. Cuando casi todos dábamos por hecho que Mackay y Brea iban a volver a ser los porteros del cuadro coruñés, la contratación de Edu Sousa (Pontevedra, 1991) abre un panorama completamente distinto para esta demarcación.
Sousa, que ya pasó por las categorías inferiores del Deportivo llegando incluso a debutar con el Fabril y a entrenar con el primer equipo, vuelve a Coruña después de haberse labrado un nombre en el fútbol modesto. Camino de los 31 años, después de dos temporadas lejos de casa, la oportunidad le llega en el mejor momento de su carrera.
Quizás no sea la firma más ilusionante de todo el mercado. Más cuando viene de descender a 2ª RFEF con el CF Talavera sin haber sido titular indiscutible y encajando 42 goles en 30 partidos, aunque hay que reconocerle parte del demérito a una defensa poco contundente y a una complicada situación extradeportiva.
No obstante, a pesar de todos estos datos, me parece un movimiento de mercado muy interesante, pues su ética de trabajo, su compañerismo y su compromiso con el equipo le van a hacer estar a la altura de las exigencias.
Centrándonos en aspectos más técnicos, Sousa destaca especialmente en su juego de pies. El modelo de juego de Víctor Cea (entrenador del CF Talavera durante casi dos temporadas) exigía desenvolverse bien en estas lides. Cualquier aficionado que haya tenido la oportunidad de ir a un entrenamiento habrá visto cómo Edu se quedaba al terminar la sesión para practicar este tipo de envíos. Las estadísticas, con una asistencia (VS Rayo Majadahonda) y un pase previo a asistencia (VS Tudelano) lo avalan.
Otra de las virtudes de Sousa son los reflejos. Es un guardameta muy intuitivo capaz de resolver situaciones límite en pocos segundos. De su nivel de confianza, como le ocurre a la gran mayoría de sus compañeros de demarcación, depende que tienda más a blocar que a despejar.
Su principal faceta para mejorar es el juego aéreo. Citando a Cristian García, su entrenador de porteros en el conjunto de la ciudad de la cerámica, “Tiene un gran tren inferior que le permite llegar a los balones sin problema. Su margen de mejora está más en la decisión sobre si salir o quedarse. Aun así, ha avanzado mucho estos dos años”.
Edu perdió la titularidad durante un tramo de ocho partidos. Casualmente, el primero de ellos fue la visita del Talavera a Riazor. Sin embargo, con la dificultad que conlleva, tuvo la capacidad de darle la vuelta a la situación y volver a ganarse el puesto.
Excepcional como persona fuera del campo y siempre generoso con los aficionados, con Edu Sousa el Deportivo mantiene la política de firmar jugadores en su mejor momento deportivo y con aspiraciones a seguir creciendo. Y qué mejor barco para hacerlo.
Daniel Pérez, periodista y ex jefe de prensa del Talavera