Después de que se hayan disputado catorce jornadas y a falta de una para llegar al ecuador de la temporada, el Fabril encabeza la clasificación en Tercera Federación con veintinueve puntos, a dos de su inmediato perseguidor, el Racing Vilalbés. Los de Óscar Gilsanz se han asentado en el primer puesto de su grupo, el único que permite ascender de manera directa a Segunda Federación.
Una buena actuación que recuerda a la de la temporada 2016-17, cuando el filial deportivista consiguió ascender de Tercera División a la extinta Segunda División B. En aquel entonces, el equipo dirigido por el actual técnico del Racing de Ferrol, Cristóbal Parralo, tuvo que disputar un playoff a pesar que ser el campeón de su grupo, algo que actualmente no es necesario. A pesar de esta diferencia, son varias las similitudes entre el Fabril de esta campaña y el de aquel entonces, al que parece que puede emular.
Dos equipos goleadores
En los catorce partidos que se han jugado correspondientes a la actual temporada, los fabrilistas se han destapado como un equipo con gol. Son veintiocho los tantos anotados hasta ahora por los jóvenes futbolistas del Deportivo, lo que da una media de 2 goles por encuentro. El máximo anotador de los blanquiazules es Martín Ochoa, un delantero aún en edad juvenil que ha sido capaz de marcar diez goles en once partidos. Unas cifras que invitan a pensar en la posibilidad de verle en algún momento en la primera plantilla.
Seis temporadas atrás, con Óscar Pinchi como pichichi con 22 goles, el total de la plantilla ascendió hasta los setenta y nueve. Una cantidad que deja una media de 2,07 goles por encuentro. Se trata de la mejor estadística goleadora en más de diez años, la cual podría verse alterada en caso de que el nivel de los actuales canteranos continúe en una línea similar en lo que resta de campeonato.
Defensas muy parecidas
En el aspecto defensivo la diferencia es mínima. Mientras que el Fabril actual ha encajado 0,85 goles por encuentro, el de hace seis años vio como los rivales conseguían perforar la meta de Álex Cobo una media 0,81 veces. Un dato que ayudó al equipo de Parralo a lograr el ascenso; mismo camino que busca transitar ahora el filial coruñés.
Puntuación de campeón
Las buenas actuaciones de ambas plantillas se tradujeron y se traducen en buenos resultados que sitúan al filial en la primera posición. Ello pasa por la obtención de una buena renta de puntos en cada uno de los partidos, algo en lo que encontramos nuevos paralelismos. En la campaña 2016-17 los herculinos sumaron 2,1 puntos por partido; en lo que va de temporada, Óscar Gilsanz ha llevado al equipo a conseguir una media de 2,07.
Tras las vacaciones de Navidad, y con media temporada por delante, el Fabril tiene en sus manos repetir éxitos pasados y subir un escalón que le acerque al primer equipo y aumente el nivel competitivo para las futuras generaciones salidas de Abegondo. Su primer rival en ese camino será el CD Barco, al que recibirá en Abegondo el fin de semana del 7 y 8 enero en un horario todavía sin confirmar.