No es el equipo que más vistoso. Tampoco el más ofensivo. Pero el Fuenlabrada ha mostrado ser más, mucho más, que los 2 exiguos puntos que tambalean en su casillero a estas alturas de competición. El conjunto madrileño recibe este domingo al Deportivo de La Coruña como penúltimo del Grupo 1 de Primera Federación, penalizado por un déficit terrorífico: su falta de gol, que no de ocasiones.
Porque, como decimos, el Fuenlabrada ha estado lejos de ser el equipo más brillante de la categoría en estas primeras 5 jornadas. Pero el bloque de Carlos Martínez ha competido lo suficientemente bien como para llevar algún punto más e incluso haber abierto ya su zurrón de victorias. No lo ha hecho todavía porque, a pesar del nivel de su organizador Ale Galindo y su acelerador Dani Nieto, le ha faltado acierto en el tramo final. De hecho, sus únicos tantos han llegado desde el punto de penalti y con un disparo por la escuadra desde más de 30 metros de Sotillos. Ambos, ante el Barça B. Ambos en acciones relativamente aisladas.
El bagaje es demasiado escaso para sus 5,65 xG (goles esperados) totales. Así, en cada partido genera, de media, ocasiones con una expectativa de gol de 1,13. Pero solo materializa 0,4. Con el agravante de que sus 2 tantos llegaron, además, en el mismo partido. Así es imposible.
Aunque esto de las dificultades ofensivas es algo que tampoco puede sorprender, sobre todo si tenemos en cuenta cómo la plantilla del Fuenlabrada ha ido bajando de nivel temporada tras temporada. El pasado curso, a pesar de ser uno de los recién descendidos, conformó un ‘roster’ que dejaba demasiadas dudas. Eso provocó que no pudiese amarrar la salvación hasta la última jornada. Pero, al menos, poseía algo más de talento ofensivo con el díscolo Ibán Salvador y el persistente Diego García, a los que se unía el siempre inteligente Fer Ruiz. 21 de los 32 goles del equipo fuenlabreño llevaron sus firmas, con especial trascendencia para los 15 del actual punta del Leganés de Borja Jiménez.
De aquel trío hoy solo permanece Fer Ruiz, un futbolista que sigue siendo capital no solo en el juego entre líneas partiendo desde la banda derecha, sino sobre todo a la hora de ejercer de receptor de los envíos largos o como hombre dominador en las segundas jugadas. El excapitán del Sanse es uno de los indiscutibles en un equipo que basa casi todas sus acciones de finalización exitosas en meter el balón al área, pero que mezcla juego directo con otro más combinativo, siempre como paso previo para generar desorden en el rival y poder encontrar una buena situación por fuera para cargar las inmediaciones de la meta rival.
Es en esa última faceta en la que sobresalen tanto Galindo como Nieto. El primero de ellos, corazón del equipo, llegado desde el Real Murcia, ha ido variando de compañero en el doble pivote de Martínez. Del eterno capitán Cristóbal a Álvaro Bravo. Por delante, siempre Dani Nieto. Porque aunque el ex del Racing de Ferrol ha actuado en algún partido tirado a la izquierda para dar paso a una doble punta capaz de atacar más al espacio, ha sido jugando por dentro cuando ha sobresalido.
Así, no sería de extrañar que Nieto repitiese como mediapunta por detrás de un punta que, últimamente, ha sido Diego Gómez. Al contrario que su tocayo García, al exdelantero del Cacereño por el momento no le han ido tan bien las cosas, por lo que no sería de extrañar que el puesto fuese a parar a Ilies Hassaine o a Sergio Benito. El ex de Valladolid Promesas o Badajoz, que sonó para el Dépor en su momento, ha ido mezclando presencias como delantero con otras actuaciones partiendo desde la banda.
Quien sumará seguro en ataque llegando desde atrás en ese carril izquierdo es Álvaro Barbosa. El lateral ha sido indiscutible en los onces del Fuenlabrada y su aportación ofensiva es clave para dotar de profundidad al equipo madrileño. Peor rinde en área propia, como ya demostró el pasado curso en Riazor. Aunque ese es un mal que prácticamente se puede extender a buena parte de todo el equipo, que ha sufrido en los envíos al área del rival. De sus 5 goles encajados, uno ha llegado a partir de una falta lateral, otro de un córner y un tercero, en un centro al segundo palo que Vigaray no acertó a defender.
Precisamente el ex de Getafe, Alavés y Zaragoza debería ser una garantía en ese sentido. Pero el lateral derecho padece una lesión en el recto femoral y, al igual que el extremo Raúl Hernández, será baja ante el Dépor. Eso rebaja todavía más la media de edad de la zaga de un Fuenla en la que Sotillos apunta a ser lateral para dejar su puesto al lado de Manu Lama a David Alba. Todos de 25 o menos años.
El entrenador del Fuenlabrada y su curiosa relación con Idiakez
Así, el Fuenlabrada tratará de optimizar sus no elevados pero sí interesantes recursos para potenciar un juego directo que se hace todavía más evidente como necesario teniendo en cuenta el estado del césped del Fernando Torres. Quien tendrá que adaptarse será el Deportivo de Imanol Idiakez, un técnico que guarda una curiosa relación con Carlos Martínez: el del Fuenla fue quien le sustituyó el pasado curso en el Leganés, ascendiendo desde el segundo equipo.
Ambos entrenadores, por lo tanto, no solo se conocen sino que tuvieron un evidente trato derivado del roce primer equipo-filial. Ahora, se miden por primera vez con estilos distintos, situaciones clasificatorias contrapuestas pero mismas urgencias, cada uno en su contexto.