Para Luis Enrique, que el Deportivo haya empatado en sus dos últimas visitas al Camp Nou es cuestión de «fortuna». El técnico del Barcelona calificó de «injusto» el empate 2-2 aunque reconoció que los de Víctor supieron trabajar el partido.
«El partido fue muy diferente a nivel táctico de lo que nos solemos encontrar. Suelen presionar o asegurar con una línea detrás del balón, pero ellos han hecho otra cosa. Había tres jugadores tapando a nuestros centrales, era un partido de siete contra siete al borde del área. Normalmente sabemos cómo aprovechar esta situación, pero les ha salido bien a ellos», indicó en su primer análisis del encuentro.
Agregó, además, que «defienden con menos jugadores pero en el contragolpe tienen a tres por delante del balón. Al principio nos costó más, pero en la segunda parte lo controlamos hasta que les anularon a ellos su primer gol», profundizó.
A partir del 27 de la segunda mitad, fue cuando el equipo de Luis Enrique empezó a pasar apuros. «Empezamos a encadenar errores y pérdidas ridículas, al final penalizamos esos errores. El año pasado fue igual, sin dejarnos en absoluto nos empataron. El Dépor tiene fortuna cuando viene a Barcelona».
La cara y la cruz de los banquillos del Camp Nou. pic.twitter.com/lH4wJ3VAiz
— La casa del fútbol (@casadelfutbol) diciembre 12, 2015
Para Luis Enrique, ese 2-2 es un resultado «injusto. Hay que saber que los partidos no están ganados pese a ir 2-0. Estamos decepcionados pero estas cosas pasan a lo largo de la temporada y es una lección para aprender. Quizá esperaba otra cosa de los cambios, pero me lo apunto. Puede ser un fallo mío, esperaba más en los últimos minutos. La responsabilidad es del entrenador«, puntualizó.
Por último, destacó que el Deportivo lo hizo «bien, ha sido ordenado. Han planteado un partido valiente y el resultado final dice que han acertado. El fútbol no siempre premia al que más ocasiones tiene sino al que es más efectivo», finalizó.
