Víctor Mollejo tiene claro que un factor que debería ser externo como los colegiados está influyendo de forma decisiva en los partidos del Deportivo. Así lo explicó tras la derrota en Zaragoza: «Para nada estamos teniendo suerte con los arbitrajes. Pueden equivocarse, pero hoy creo que la expulsión es evitable. La falta es amarilla, pero viene de una falta de Álex que es la que se tiene que pitar. Ha decidido que tenía que expulsar a Gaku. Cuando expulsas a alguien tiene que ser porque no vas a jugar el balón o algo… Gaku es el que menos tenía que irse«.
El propio joven también está teniendo problemas con la rigurosidad de los trencillas y vio una nueva amarilla: «No hay cosa que más me fastidie que recibir tarjetas por tonterías. Hoy era evitable, pero llevo ya nueve amarillas. Las estuve revisando y hay muchas que se pueden ahorrar«.
En lo que se refiere al partido, se mostró tranquilo pese a cortar el buen momento: «Sabíamos que la racha iba a terminar. Sabíamos que era una posibilidad. Vamos con calma, con ganas de que llegue el partido y volver a ganar. Hemos crecido con balón, en muchas situaciones del juego. Pero esos errores a balón parado nos han matado. El tercer tanto ya es una consecuencia de la expulsión. Pero estamos con ilusión, pensando en el Lugo».
Bóveda: «Hay que darle máxima importancia al balón parado»
Bóveda lamentó los fallos de concentración y destacó la importancia de no despistarse ni por un segundo: «Hay que darle máxima importancia al balón parado. En cada acción. No digo que lo estemos haciendo mal, pero cuando uno decide posicionarse de una forma concreta, con el bloque bajo, hay que concienciarse de que igual que trae ventajas, el otro equipo tiene más oportunidades que tú. Es el ejercicio de saber que van a pasar cosas. Vamos a ser fuertes en eso. Lo digo más que como crítica, como algo a tener en cuenta».
De todas formas, el vasco está convencido de que sólo es un alto en el camino: «En cuanto a rendimiento, creo que ha sido un buen partido. Se desvirtúa todo con la roja a Gaku, eso lo tengo menos en cuenta. Pero once contra once he visto bien al equipo. Estoy bastante poco preocupado por cómo estamos ahora«.
No quiso ensañarse con López Toca, pero habló con naturalidad de lo que él consideran errores que marcan: «Me mantengo al margen de analizar el arbitraje. Evidentemente el árbitro tiene influencia directa en el resultado muchas veces. Una acción decide 90 minutos. Pero partiendo siempre de la base de que no creo que haya una mano negra. Las acciones que te favorecen y te penalizan se compensan».
Con el derbi ante el Lugo en el horizonte, Bóveda ve fundamental mantener la humildad: «Todos los partidos son importantísimos. Pase lo que pase contra el Lugo, habrá que remar mucho para conseguir nuestro objetivo. Hay que seguir en la misma línea, sintiéndonos con confianza y con la humildad necesaria de saber lo que somos, lo que hemos venido siendo y no caer en el error de subestimar a nadie. Es uno de los pocos partidos en el que el rival está por detrás de nosotros, pero eso no nos tiene que afectar de ninguna manera».