Natxo González compareció en rueda de prensa en una previa del Mallorca vs Deportivo marcada por la ausencia de Carles Gil en la convocatoria. El técnico lo explicó: «Es una decisión mía. Meto a Christian y lo saco a él. Sin más. Al final somos exigentes con todos. Carles estaría perfecto ahora mismo si llevase cuatro o cinco goles. Es lo que le está faltando y además los ha podido hacer. Ha dado un salto importante en esa posición. Empezó alejándose mucho del área, sin tener ocasiones, pero poco a poco ha ido teniéndolas, está encontrando el sitio en la posición. Va creciendo, pero esa posición nos tiene que dar gol».
Unido a este movimiento posiblemente vaya una variante que el entrenador prepara para el sábado, con un tridente en ataque en el que Carlos Fernández actuaría de enganche: «Es una opción, nos puede dar lo que pedimos ahí. A veces nos cierran las líneas de pase y tiene que ser un jugador que corra al espacio. Y por ser delantero puede hacerlo. Además cuando haya centros laterales tiene potencia para llegar. Carlos puede relacionarse y generar juego, pero es un perfil con más contundencia en los últimos metros».
Explicó también que los continuos cambios en el once, sobre todo en el centro del campo, no responden a que no haya encontrado su equipo: «No se trata de que no dé con la tecla, es mi forma de actuar: mover mucho a los jugadores. Eso siempre que me dé resultados. Es la mejor manera que tengo para ir conociendo al futbolista. Cómo es en casa, fuera, por detrás en el marcador, en ventaja… para tener esa información de cada futbolista tengo que verlos».
Ya hablando del Mallorca, destacó su fortaleza como local: «Su primera ventaja es ser un equipo muy hecho. Viene de conseguir un ascenso y esa dinámica suele generar buenos comienzos de temporada. Ilusión, hambre… Es muy fiable en casa y los equipos de Vicente Moreno son muy sólidos, fuertes a balón parado. No encaja mucho y en ataque tiene recursos. La estrategia, Lago Junior está en un momento increíble… llevan casi dos goles por partido«.
Natxo quiso finalizar hablando de que el bache del equipo es debido, sobre todo, a la falta de eficacia, y no cree que ahora mismo estén viniendo mal dadas: «No lo entiendo así. Esto lo veo dentro de la normalidad. Somos conscientes de que el porcentaje de puntos ha bajado, pero trato de transmitir tranquilidad. Nada de lo que pase fuera nos puede desequilibrar, ni para lo bueno, ni para lo malo. Hay que tener la capacidad para gestionar bien estas fases. Los buenos momentos, los menos buenos, como creo que es el caso, y los malos, que no es el caso. Cuando vengan los momentos delicados, lo diremos».