Finalizaba la Liga el pasado fin de semana para el Dépor ABANCA y, con ello, el sueño de jugar la ansiada fase de ascenso que permitía optar a las coruñesas a participar en la Liga Iberdrola. El proyecto iniciado hace ahora dos temporadas partía con el objetivo de situar al equipo gallego en la división de honor del fútbol femenino en el menor tiempo posible. No pudo ser la pasada campaña, con el Oviedo llevándose el título, desenlace que se ha repetido esta temporada: el Real Oviedo se impuso a las coruñesas en Ponte dos Brozos en el partido definitivo dejándolas en la segunda posición.
El equipo dirigido por Manu Sánchez realizó una temporada casi perfecta, únicamente empañada por un empate contra el Monte y la fulminante derrota ante las asturianas. No bastó, porque así es el funcionamiento de la liga femenina, en la que solo el primer clasificado de cada grupo puede participar en el play-off de ascenso. Y en esta lucha de tú a tú fue donde el Oviedo mostró su superioridad. Las azules cumplieron en el instante preciso y el Dépor falló.
Así ha concluido una nueva campaña en blanco de las herculinas. La inversión de capital, tiempo, trabajo e ilusión no han sido suficientes, pese a que los datos remiten a unas cifras arrolladoras: 24 victorias y 155 tantos anotados frente a tan solo 11 recibidos. El equipo blanquiazul ha sido el más efectivo de cara a puerta y ello se ha traducido en la presencia de sus atacantes en lo más alto de la tabla de goleadoras: el Pichichi se lo llevó Peke con 26 dianas, seguida de Gaby con 25.
Aún con el sinsabor de no haber logrado la meta deportiva de este curso, sí hay un motivo para esperanzarse de cara al futuro: la ilusión creada en torno a una afición que acompañó a las jugadoras durante todos estos meses. El impacto en el fútbol femenino gallego ha sido brutal, y la visibilidad y el reconocimiento de un deporte al que tradicionalmente le cuesta despuntar ha sido sensiblemente mayor desde que la directiva del Deportivo decidió apostar por la sección femenina.
El Deportivo Abanca, trampolín internacional
Este escaparate también ha servido para que la selección, en sus diversas categorías, siguiera de cerca la evolución de las blanquiazules: primero, Tere Abelleira se erigía como subcampeona de Europa sub-17, mientras que Nuria Rábano se proclamó vencedora sub-19 y, por último, la guardameta Malena era llamada para participar en los entrenamientos de la selección sub-20.
En esta escalada de prestigio también ha tenido protagonismo el entrenador de la plantilla. Tras dos intentonas fallidas, no parece que vayan a fallarle las fuerzas a Manu Sánchez. En sus perfiles en las redes sociales, el técnico coruñés ya ha mostrado su voluntad para ponerse manos a la obra y empezar a planificar la próxima temporada. Será el tiempo el que determine si a la tercera va la vencida. “Hoy día 1 para volver a intentarlo. Empezamos”.