Análisis individual de la actuación de los jugadores del conjunto coruñés ante el equipo comandado por José Antonio Romero.
Un gol en propia puerta del rumano Florin Andone en los últimos compases del choque insufló vida una vez más a un Deportivo que, pese a haber irrumpido con energía en los diez primeros minutos del partido, se perdió a continuación en la vorágine de nerviosismo e indecisión que ha atenazado a los herculinos en los últimos encuentros. El propio Andone adelantó a comienzos de la segunda mitad al conjunto andaluz, que arrancó un empate de un Riazor donde la última victoria local data del pasado 6 de febrero -ante el Eibar-.
Juanfran: 4. Regresó al costado diestro de la zaga e intentó, sin éxito, aportar en ataque. Y el problema residió precisamente ahí, ya que Edimar y Fede Cartabia encontraron espacios a su espalda para aprovechar la precisión de sus centros. Así llegó el gol de Andone.
Lopo: 5. Ya no es el cacique de antaño, pero conserva parte de su oficio. Atento en tareas de anticipación, el catalán logró despejar un rechace de Fabricio -previo lanzamiento de Bebé- que estuvo cerca de dejar a Héldon sólo ante el arquero canario. Abusó en exceso de la salida de balón en largo.
Sidnei: 4. Más desconcentrado que en otras citas. No tuvo demasiado trabajo con Andone, pero la permanente brega del ariete rumano sí limitó, en parte, que el de Alegrete no se aventurase tan a menudo a conducir el esférico hacia el área rival. Falló en la marca al atacante andaluz en el gol del Córdoba.
Luisinho: 3. Sufrió, y mucho, con Bebé. Pese a haber dosificado sus cabalgadas por la banda, el lateral luso se vio condicionado por una dudosa tarjeta amarilla en la primera mitad que, a la postre, fue el preludio de la expulsión que lastró al equipo durante casi la mitad del segundo período.
Borges: 3. Inconsistente. Puede que el costarricense esté pagando, en cierta medida, su fulgurante bautismo con la zamarra blanquiazul. Sin embargo, ante el Córdoba no fue brújula, y tampoco la bulldozer que el encuentro pidió por momentos. Superado.
Álex B.: 6. Sin llegar a poder hacerse con el timón en la medular, el canterano deportivista volvió a erigirse en uno de los salvavidas del equipo. Se multiplicó en las coberturas a los laterales y aportó llegada en ciertos momentos del partido. Precisamente cuando apareció Medunjanin para darle aire.
José Rodríguez: 3. No apareció. Dos semanas después de que el alicantino deslumbrase con la Sub-21 de Albert Celades como ancla en el mediocampo, la vuelta a la banda diluyó al jugador blanquiazul, que fue el primer sustituido por Víctor Fernández tras el gol del Córdoba.
Fariña: 4. Tuvo la primera ocasión clara para el Deportivo y su presencia en el centro de la línea de tres cuartos pareció dar algo de sentido y clarividencia a la segunda línea del ataque en los instantes iniciales. Sin embargo, perdió protagonismo cuando el conjunto local renunció a la posesión del balón.
Cuenca: 4. Un potente lanzamiento suyo desde el vértice diestro de la frontal del área defendida por Juan Carlos estuvo cerca de colarse en la meta verdiblanca. No obstante, con el paso de los minutos perdió peso en el partido y, pese a algún intento de desborde, apenas pudo conectar con sus compañeros.
Toché: 4. Desasistido. Prieto Iglesias anuló un gol suyo al borde del descanso que, con todo, resumió el propio planteamiento del equipo. Ante la imposibilidad de ganar la batalla en la sala de máquinas, la ecuación se resolvió con constantes lanzamientos en largo al santomerano, bien vigilado por Pantic y Crespo.
Oriol Riera: 4. El ariete catalán partió como suplente y compartió el frente de ataque por segunda vez consecutiva con Toché tras su salida. Peleó, pero no disfrutó de apenas oportunidades de gol ante un Córdoba bien plantado en defensa.
Medunjanin: 6. Bajó el balón al césped y, con el Deportivo ya en inferioridad, dio algo de sentido al juego del equipo. Más intenso que en otras ocasiones, de sus botas partió el córner que propició el tanto en propia puerta de Andone.
Hélder Costa: 5. Le tocó la difícil papeleta de abarcar la totalidad del carril izquierdo tras la expulsión de Luisinho, y el joven extremo angoleño cumplió. Ayudó en defensa y puso algo de voltaje y verticalidad a un equipo sin gasolina en el tanque cuando apenas quedaba tiempo para más. Lo intentó.
EL MEJOR
Fabricio: 8. Una intervención suya en el tramo final del partido evitó que Krhin se llevase consigo dos puntos más. Apremiado en ocasiones por la grada para efectuar los saques de puerta, se mostró muy seguro en líneas generales. No pudo hacer nada para evitar el tanto del Córdoba.
*La nota media de los jugadores del Deportivo es el resultado de las puntuaciones de toda la redacción de Riazor.org.