Se jugó en día de Reyes, pero el Dépor no hizo magia ante el Espanyol. Los de Gaizka Garitano olvidaron esa versión fluida y alegre que enamoró en el último mes de 2016 y se parecieron más al equipo de septiembre, aquel que no terminaba de convencer a la hinchada blanquiazul. Sin Ryan Babel ni Carles Gil, al Deportivo le costó encontrar la manera de hacer daño a los pericos, a pesar de jugar casi de principio a fin con sus dos artilleros en punta, una delantera formada por Florin Andone y Joselu Mato.
El Deportivo de la segunda parte gustó más que el de la primera, pero lo más positivo fue volver a Coruña con un valioso punto en la maleta. El gol de Celso Borges a la salida de un córner invitó a soñar con tres puntos de oro, pero un error de Sidnei permitió al Espanyol igualar con rapidez; y desde el 1-1 hasta el final, fueron los locales quienes más cerca estuvieron de desequilibrar la balanza, en especial tras la expulsión de Juanfran. Por eso, tal como refleja Pepe Mansilla en su Viñeta Turka… punto es punto. ¡A seguir remando!