Juan Antonio Anquela aseguró la semana pasada que para él la pretemporada sólo se trataba de sobrevivir. De ir cogiendo ritmo y preparándose para la competición. Y aunque eso sea cierto en parte, el andaluz, como cualquier entrenador, tiene claro que es en los amistosos donde debe experimentar, más acabando de llegar. De momento, si algo queda claro después de los partidos ante Fabril y Racing de Ferrol es que el técnico tiene previsto entregarle el timón del Deportivo a Álex Bergantiños y Gaku Shibasaki.
Quizá sea la pareja esperada por todos para el centro del campo, pero Anquela no ha dudado ni un segundo y quiere que ambos generen automatismos cuanto antes para mover el balón de la defensa al ataque. Coruñés y nipón han sido titulares en los dos encuentros y ya suman 90 minutos juntos en el terreno de juego. Hace bien el preparador en querer crear química desde el primer momento, porque lo que pasa en la sala de máquinas es decisivo, como ya se vio la temporada pasada. Si la medular falla, falla todo.
Shibasaki hasta ahora ha sido intermitente. Se ve que quiere mandar y no tiene ningún problema en pedir el balón de forma constante, pero se nota que todavía se está adaptando a sus nuevos compañeros. Ha alternado buenas combinaciones con malos pases y en ocasiones solapa demasiado su posición con el compañero.
Álex Bergantiños desde el principio
Y en el caso de Bergantiños, ver a lo que apunta en este inicio de pretemporada hace que nos hagamos una pregunta: ¿Será este el año en el que Álex sea titular desde el primer minuto? El coruñés ha acabado siendo importante siempre que ha jugado en el Deportivo, pero después de ganárselo a pulso y no ser la opción principal ni la secundaria cuando arrancan las ligas. Tras su paso al frente en el último tramo del curso pasado, puede que por fin le haya llegado el momento.
