Se acabaron las vacaciones de Navidad para el Deportivo y el regreso al trabajo en este último día de 2018 se produjo con buenas noticias para Natxo González. Como se esperaba, el parón le ha sentado bien a los jugadores lesionados y tanto Carlos Fernández como Gerard Valentín, los dos que terminaron tocados, se han incorporado al grupo en la vuelta a los entrenamientos. Ambos habían dejado muestras de mejoría antes del duelo con el Cádiz y si todo va según lo previsto recibirán el alta médica para enfrentarse al Lugo el domingo.
Especialmente importante se antoja el regreso del delantero sevillano. Porque Borja Valle, que ha ocupado su lugar en la punta del ataque, ha rendido bien, aportando dos goles en los tres encuentros que se ha perdido Carlos. Pero también es cierto que el juego del equipo coruñés ha decaído coincidiendo con su ausencia, así como el rendimiento de Quique González, lo que probablemente no sea casualidad.
Natxo cuenta con toda la plantilla disponible y esta mañana la tuvo a prácticamente toda a sus órdenes. Porque los que tuvieron que viajar fuera de Europa para estar con sus familias no tenían que regresar hasta el día 2, pero Dubarbier y Didier Moreno se han presentado en Abegondo voluntariamente para empezar con el resto de sus compañeros. No ha sido el caso de Fede Cartabia ni Pedro Sánchez, este se ejercitó en el gimnasio, las dos únicas ausencias en el primer día de trabajo.
El técnico blanquiazul hará un punto y aparte mañana, dándole el día de Año Nuevo libre a sus jugadores, pero para el miércoles ha programado otra doble sesión (como la de hoy lunes) en la que ya se meterá de lleno a preparar el derbi gallego que abrirá 2019. El equipo espera volver a la senda del triunfo tras el amargo sabor que dejó la derrota en el Carranza y ofrecerle a sus aficionados el mejor regalo de Reyes.