El Deportivo de La Coruña no podrá contar ante el Rayo Majadahonda con Rubén Díez. El centrocampista maño es baja por un problema muscular. Y sin él, Óscar Cano pierde a su motriz de juego ofensivo.
Porque desde la llegada del que había sido su entrenador en el Castellón, Díez ha retrasado su posición para intervenir en la fase con balón de su equipo en todas las alturas. Partiendo desde el carril intermedio derecho pero con libertad, Rubén ha sido una de las claves de la mejora del Dépor. Tanto que incluso ha hecho olvidar a Juergen Elitim, algo que parecía difícil.
El zaragozano es el futbolista del Dépor que más pases recibe de media este curso. Y también el que más ejecuta. Es decir, el que más trascendencia tiene en el circuito asociativo de su equipo. Pero por primera vez desde su llegada, Cano no tendrá a su disposición al ‘jefe’ de su construcción y deberá improvisar una solución en el centro del campo.
Y aunque el Deportivo no tiene a ‘otro’ Rubén Díez, sí cuenta con jugadores capacitados para sustituirle o para desempeñar otra función y desencadenar otro tipo de comportamientos del equipo. ¿Quiénes son los posibles sustitutos de Rubén Díez y qué pueden aportar?
Diego Villares
El vilalbés podría regresar al centro del campo. Diego Villares es un jugador que parece muy bien valorado por Cano, pero el entrenador andaluz ha preferido apostar por una sala de máquinas conformada por Díez, Olabe e Isi Gómez, capaz de dotar de más velocidad a la circulación de balón a costa de perder el recorrido de Villares.
Más allá de su última aportación desde el lateral derecho, Diego ha sido pivote e interior con Cano, que en su momento destacó que lo veía útil en el carril izquierdo para activar a Raúl Carnero. Con el lateral de baja e Isi Gómez, habitual interior izquierdo, disponible, tendría sentido no tocar demasiado y colocar a Villares como interior derecho.
Con el ’22’ en el centro del campo sería de suponer que ese interior derecho cambie de comportamiento y de altura. Villares participa menos en la construcción del Deportivo, aunque puede descolgarse y sumar movimientos en profundidad útiles para el equipo. De todos modos, en muchas ocasiones, Cano ha preferido que el lucense se contuviese para poder contar con él en la transición defensiva. Aunque uno de los ‘fuertes’ de Villares es presionar hacia delante.
Mario Soriano
Si Óscar Cano pretende no modificar la estructura del equipo ni tampoco muchos de sus comportamientos ofensivos, retrasar la posición de Mario Soriano puede ser una buena solución. El madrileño es el futbolista más parecido a Rubén Díez dentro de la plantilla del Deportivo. Posee buena calidad de pase, capacidad para ubicarse en los espacios y perfilarse bien, buen control e incluso potencia y habilidad para superar rivales en espacios cortos.
El ’10’ deportivista está más habituado a actuar en el perfil izquierdo, por lo que si finalmente retrasa su posición sería lógico que Isi Gómez cambiase de carril y actuase más hacia la derecha, como hacía el pasado curso en el Badajoz -con el propio Cano durante buena parte de la temporada-.
El acercar a Soriano a la base de la jugada, tal y como ha sucedido ya en algún momento este curso, abriría la posición de extremo izquierdo. Sin el canterano del Atlético de Madrid ahí, el Deportivo podría sumar una pieza más específica de banda y no tan tendiente al juego interior.
Max Svensson o Kuki Zalazar
La última opción más plausible sería la de modificar la habitual estructura del 4-3-3 desde la que el Deportivo ha crecido. El Rayo Majadahonda es un equipo habituado a elevar la altura de su bloque, algo que ofrece espacios a espaldas de la última línea. De mantener ese comportamiento, sería interesante que el Dépor ganase piezas para trazar desmarques más verticales.
En este contexto encaja el retorno al once de Max Svensson, aunque el catalán regresa de lesión. Otra opción sería apostar en la punta del ataque por Kuki Zalazar o Alberto Quiles, apostar por el 4-2-3-1 y permitir todavía más libertad a Lucas Pérez para construir desde la mediapunta.
Esa novedad provocaría que el doble pivote, compuesto a priori por Olabe e Isi Gómez, tuviese menos posibilidad de aparecer por delante de la línea de balón. Y, por lo tanto, que el Deportivo tuviese menos opciones de progresar desde la aparición de jugadores ocupando espacios tras superar la altura del poseedor del balón.
No hay que descartar tampoco el regreso de Álex Bergantiños al centro del campo para desplazar a Olabe al interior o la apuesta por tres centrales, aunque a priori son opciones más ‘rompedoras’ en comparación con lo visto hasta ahora en el Deportivo de Cano.