No están siendo unos días fáciles para el Guijuelo. Después de varias semanas lidiando con positivos por COVID, el conjunto salmantino está ahora mismo inmerso en un exigente calendario de tres partidos en siete días. Con una situación delicada en la tabla y tras un cambio en el banquillo, el club decidió quedarse en A Coruña hasta este miércoles, donde cierran su ‘gira gallega’ en Barreiro ante el Celta B. Y, como buen anfitrión, el Deportivo ha estado a disposición del Guijuelo.
El conjunto chacinero se ha entrenado esta mañana en el campo de O Monte, en Santirso, para preparar esa visita al filial celeste. Y lo ha hecho sin varios jugadores que terminaron lesionados el duelo del pasado domingo en Riazor. Ahí es donde han intervenido los Servicios médicos del club blanquiazul, realizándole las pruebas y estando pendientes de la evolución de esos jugadores durante su estancia en la ciudad. El Guijuelo no ha dudado en agradecérselo a través de sus redes sociales:
Queremos agradecer publicamente al @RCDeportivo el trato recibido al poner a nuestra disposición a sus SERVICIOS MÉDICOS para hacer las pruebas necesarias a nuestros jugadores lesionados y estar en todo momento pendientes de su evolución ¡Club señor!
Muchas gracias de corazón💙 pic.twitter.com/LvgFml4Paa
— CD Guijuelo (@clubdepguijuelo) February 16, 2021
Lo cierto es que el Guijuelo puede acabar convirtiéndose en un aliado del Dépor en este final de temporada. Después de sacar un empate en Pasarón, rival directo de los coruñeses, esta semana visita a otro equipo que pelea el ascenso como el Celta B. Y todavía tiene que jugar también contra el Zamora y el Racing de Ferrol.
La última muestra de solidaridad de los servicios médicos del Deportivo
El buen gesto de los Servicios médicos del Deportivo no debe sorprender a nadie, ya que no es más que la última muestra de solidaridad de un grupo, encabezado por el Doctor Carlos Lariño, que siempre está dispuesto a ayudar a los demás. Ya lo hizo el pasado verano, durante toda la crisis sanitaria del Caso Fuenlabrada, cuando se encargó personalmente de estar en contacto con los jugadores de la expedición madrileña mientras estuvieron confinados en A Coruña. El club fuenlabreño había viajado sin médico.