Han sido muy pocos los futbolistas que ha decidido colgar las botas en el conjunto herculino en la última década, por uno u otro motivo.
Óscar Bouzas – Jorge García | A Coruña
La despedida de Juan Carlos Valerón del Deportivo y su posterior fichaje por la UD Las Palmas han subrayado una situación que se ha producido reiteradamente durante los últimos años: muy pocos futbolistas eligen A Coruña para pasar el último tramo de su carrera, aunque hayan vestido la zamarra herculina durante la mayor parte de su vida deportiva. Ya sea por las aspiraciones competitivas, por la economía o por desavenencias con Augusto César Lendoiro, el conjunto gallego no parece ser una buena opción para colgar las botas.
Tras la temporada 2012/2013, dos jugadores clave para la entidad como fueron ‘El Flaco’ e Iván Sánchez Rico ‘ Riki’ abandonaron la disciplina blanquiazul para firmar sus, en teoría, últimos contratos en otros equipos. El canario ha vuelto a su casa, Las Palmas, después de 13 cursos como deportivista, en los que incluso llegó a anunciar que se retiraría en Riazor. En lo que respecta a Riki, el de Aranjuez estará tres campañas en el Granada, después de vivir siete en tierras gallegas. Ambos, alegaron «desgaste» en sus despedidas.
Años atrás también hubo casos en los que jugadores veteranos no quisieron terminar su periplo en el fútbol con la casaca blanquiazul. Sergio González se marchó al Levante en el año 2010 después de no llegar a un acuerdo de renovación con el Deportivo, que además le debía dinero tras sus nueve cursos como mediocentro coruñés. Otros ejemplos son los de José Francisco Molina y Quique Romero, que prefirieron finiquitar sus carreras en su tierra en el curso 2006/2007, jugando en el Levante y en el Betis, respectivamente, después de seis y ocho temporadas como indiscutibles en el once gallego. Por su parte, Víctor Sánchez del Amo se retiró en el 2008 tras jugar una campaña en el Panathinaikos de Grecia y otra en el Elche, después de seis siendo el extremo derecho de Javier Irureta y de Joaquín Caparrós. Además, Noureddine Naybet se despidió del fútbol en el Tottenham (2006), tras ocho años como blanquiazul.
Por otro lado, todavía es menos habitual que los jugadores que estuvieron pocos años en el Deportivo consigan en él su último contrato, tanto por petición suya como por decisión de la secretaría técnica. Así, veteranos como Claudio Morel o Carlos Marchena, los dos aún en activo, dejaron el club herculino antes de afrontar su última etapa como profesionales.
Los que sí se quedaron
La afición coruñesa también ha podido ver cómo futbolistas emblemáticos dentro de la historia blanquiazul culminaban sus carreras en A Coruña, aunque en casos contados. Sin duda, los dos más importantes de los cuatro que ha habido en la última década fueron los de Fran, después de 17 campañas como deportivista, y Mauro Silva, que durante 13 años fue uno de los referentes del Súper Dépor. Ambos, se despidieron a hombros de Riazor el 22 de mayo de 2005, pero en guerra con Lendoiro.
Durante la época en la que Deportivo era uno de los referentes de Europa, también colgó las botas en A Coruña Donato Gama da Silva. El brasileño dijo adiós en el año 2003 con 40 primaveras, tras diez temporadas como uno de los hombres más importantes y queridos por la grada. Además, Jacques Songo’o regresó del Metz francés al conjunto gallego en el año 2003 para estar una campaña a las órdenes de Irureta antes de retirarse. El camerunés ya había vivido antes (1996/2001) una primera etapa como guardameta herculino, en la que había sido uno de los protagonistas del título de Liga cosechado en el 2000.
Manuel Pablo, el próximo en decidir
El actual capitán blanquiazul manifestó al inicio del presente curso que esta será su última temporada -la 16ª- como jugador del Deportivo, y dio a entender que en un futuro podría tener otro cargo dentro de la entidad. Sin embargo, el lateral también expresó en más de una ocasión su deseo de retirarse en la UD Las Palmas, así que tampoco sería una sorpresa si el canario decidiese finalizar su carrera en su tierra, como ha hecho su amigo Valerón.