El central, que formó parte del Deportivo que se vio perjudicado por aquel encuentro, calificó de «sucio» el posible pacto.
En aquella última jornada de la temporada 2010/2011 que acabó con el Deportivo en Segunda tras más de dos décadas en la élite, los coruñeses dependían de sí mismos para salvar la categoría pero también les servía que el Real Zaragoza perdiera su partido. Sin embargo, los maños se impusieron 0-2 en el Ciutat de Valencia con doblete de Gabi frente a un Levante ya salvado. Ahora, la fiscalía anticorrupción ha llamado a declarar a gran parte de los futbolistas que participaron en aquel encuentro al encontrar extraños movimientos bancarios entre ellos.
Esta mañana, Alberto Lopo, que formaba parte de la plantilla blanquiazul que se vio perjudicada por aquel resultado, fue contundente a la hora de referirse a este tema: «Está claro que el descenso ya no nos lo va a quitar nadie, pero si hubo juego sucio sí se tendría que actuar. Nosotros tenemos la conciencia muy tranquila. Si han llamado a declarar a estos jugadores será porque pasó algo y a ver si se demuestra qué pasó. Personalmente, pienso que si uno actúa así se tendría que sentir sucio por dentro. Esa persona no tendría que estar haciendo un deporte profesional. Es un perjuicio tanto para él como para el resto de equipos que nos vimos implicados. Si se demuestra, máximo castigo», declaró.
En una comparecencia en la que también repasó el mal momento de resultados que vive el cuadro herculino, el catalán definió como «un palo duro» la derrota ante la UD Almería en el último suspiro después de haber hecho «un buen trabajo». Para él, es «difícil» hacer un análisis de cuales son los principales problemas del equipo y quiso centrarse en «trabajar todavía más». «Cualquier trabajador en su oficio, si las cosas no salen bien, está preocupado, pero queda mucho camino por delante y tanto veteranos como jóvenes tenemos que tirar del carro. Hay que ser positivos y creer en lo que se está haciendo. Todo tiene que llegar», dijo.
Este domingo, el Dépor visitará el Sánchez Pizjuán, un campo «complicado» en el que se enfrentará a Sevilla que «está muy bien». Sin embargo, Lopo tiene claro que «todos los partidos van a ser difíciles en nuestra situación y no podemos dar nada por perdido. Hay que salir allí a intentar hacerlo lo mejor posible y que toda la mala suerte que hemos tenido hasta ahora se transforme en positivo».
Para dicho choque, Víctor Fernández ensayó esta mañana un sistema con tres centrales (Diakité, Lopo y Sidnei) y dos carrileros largos (Juanfran y Canella), pero el defensa de 34 años aseguró no saber aún qué dibujo utilizarán frente al conjunto de Unai Emery.