El fichaje de Miku por el Deportivo ha sido recibido con cierto escepticismo por una parte de la afición. Su edad, 35 años, unido a unas últimas temporadas en ligas como las de Chipre o la India, alejadas del máximo nivel, provocan que muchos duden de lo que puede ofrecer. Pero el delantero venezolano parece estar muy ilusionado con esta nueva aventura. Es más, según señaló en su cuenta de Instagram, incluso la ve como cosa del destino y ya ha aprendido un mensaje que siempre cala: «¡Forza Dépor, carallo!».
Después de apenas un entrenamiento con el grupo, Miku se estrenó el sábado con el Deportivo ante el Racing Villalbés jugando sus primeros minutos como blanquiazul. Esa misma noche, fueron precisamente esos colores los que lo llevaron a hacer un montaje en sus redes sociales comparando una foto suya de niño y otra tomada hacía apenas unas horas: «¿El destino? A la izquierda, mi primer equipo de niño, en el Colegio Santo Tomás de Villanueva, en Caracas, Venezuela. A la derecha, mi nuevo equipo, el gran Deportivo. Un club con una historia grande, una afición increíble y una ciudad hermosa. Vamos juntos a poner nuestro granito de arena para alcanzar los objetivos de este club gigante. ¡Forza Dépor, carallo!».
El punta es consciente además de las conexiones que tiene y siempre ha tenido Venezuela con Galicia, por eso sabe que en su país estarán pendientes de él: «Es un equipo y una comunidad muy arraigado en Venezuela por todas las familias gallegas que emigraron años atrás. En la hermandad gallega de Caracas y en la de Valle fresco sé que estarán muy contentos».
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