Saúl García ha sido uno de los jugadores elegidos para la operación salida del Deportivo en este mercado de invierno. El lateral cántabro, sin oportunidades en A Coruña, se ha marchado al Numancia y nada más aterrizar ya se ha estrenado con los sorianos para, como él mismo asegura, «volver a sentirme futbolista»: «Estoy contento por los primeros minutos después de mucho tiempo, era una situación difícil. Feliz por volver a jugar, ayudar al equipo… todo jugador sueña con partidos así y salió bien. Dimos la cara y me voy feliz».
El jugador, que le deseó al Dépor que «ojalá cuando vayan al Bernabéu puedan hacerlo igual o mejor que nosotros», habló en Radio Coruña de su salida frustrada al Brescia en verano y reconoció que sabía a lo que se atenía quedándose: «Son circunstancias que suceden. Entraron otras opciones, que si el club, que si la cesión… las circunstancias hicieron que me quedase. Ya sabía lo que podía suceder, que no tuviese minutos, y fue lo que sucedió. Creo que hay cosas que se podían haber hecho mejor, pero no se trata de meternos en detalles».
Saúl no cree que todos los líos de despachos por la demanda del Valladolid le estén pasando factura, pero sí afirma que no está viviendo una época fácil entre pocas oportunidades y continuos traslados: «Sólo pienso en tener estabilidad. Estos años no han sido fáciles. Estar cada seis meses en un sitio, dando vueltas… no he tenido estabilidad para mí ni para mi novia, que es mi gran apoyo y la que me acompaña. Tener que ir de un sitio, luego a otro… firmar en un sitio y que por circunstancias nunca haya tenido oportunidades, ni sentirme partícipe en la plantilla. Ahora sólo pienso en jugar lo máximo posible y en junio ya se verá. Me queda un año y medio de contrato y no pienso mas allá de disfrutar ahora lo máximo que pueda».