Después de varios entrenamientos ya a las órdenes de Rubén de la Barrera, Diego Villares dejó sus primeras impresiones como nuevo jugador del Deportivo apuntando, antes de nada, que todavía lo está asimilando: «Nunca se me había pasado por la cabeza jugar en el primer equipo. Pero afronto con mucha ilusión esta oportunidad. Estoy como en una burbuja, es cuestión de ir asimilándolo. Es una buena oportunidad para mí y lo voy a dar todo. He hablado con Rubén, me pidió que sea el futbolista que he sido hasta ahora en el Fabril y que ya me irá diciendo lo que quiere de mí en cada partido».
Precisamente de su rol en el Fabril habló para definirse como futbolista: «Estaba jugando en un doble pivote, casi siempre con un mediocentro más defensivo al lado. Mi perfil es más ofensivo, sin llegar a ser un mediapunta. Un ‘8’ que puede llegar al área, pero que también tiene trabajo defensivo«. Con el cambio de categoría, el centrocampista espera «sobre todo un cambio de ritmo. En cuanto a partidos, jugadores… se notará también la calidad. Pero también cada partido es un mundo y a medida que vayan pasando los partidos, me iré adaptando».
Villares, encantado con su oportunidad en el Deportivo
Villares no cree que llegar a última hora de mercado y con el equipo en una situación límite sea un problema: «Quizá pueda parecer un marrón desde fuera, pero todo lo contrario. Tenemos esa ilusión de ayudar al equipo, sobre todo los que venimos desde abajo, porque siempre los estás viendo ahí en los entrenamientos». Se ve listo para jugar ante el Coruxo: «A pesar de estar varias semanas confinado, hemos ido haciendo los ejercicios que nos enviaron y estoy bien en lo físico. En cuanto al equipo, habrá que ver a medida que pasa la semana si puedo entrar en la convocatoria».