El confinamiento domiciliario marcó los meses de abril y mayo para el Deportivo. El equipo se mantenía en puestos de descenso desde la suspensión de la competición a mediados de marzo y no volvería a entrenar hasta el 8 de mayo.
El mes de abril de la plantilla blanquiazul fue igual que la de todos los aficionados, confinados en sus casas. Manuel Pombo preparó un plan que los futbolistas perdiesen lo mínimo posible entrenando en sus casas e incluso se sorprendió de cómo volvieron algunos a los entrenamientos. El preparador físico también se quejó de la decisión de La Liga de que los partidos se disputasen cada 48 horas después de tanto tiempo de inactividad.
Borja Valle fue uno de los jugadores del Dépor que más se dejaron ver por redes sociales durante el confinamiento. El berciano aprovechó para hacer directos en redes sociales con otros miembros de la plantilla y algunos amigos.
En mayo se volvió a entrenar
No fue hasta el 8 de mayo cuando los futbolistas blanquiazules volvieron a pisar el césped de la ciudad deportiva de Abegondo. Al tratarse de entrenamientos individuales, el club preparó un protocolo para dividir la plantilla en tres grupos. Doce jugadores de campo entrenaban a las 9:30 de la mañana en varios de los campos de la ciudad deportiva. Tras ellos, otro grupo, también formado por jugadores de campo, se entrenaba a las 11:30. Por su parte, lo porteros entrenaron por la tarde.
A partir del día 18, Fernando Vázquez ya pudo realizar entrenamientos colectivos, con un máximo de diez jugadores por grupo, además de poder dar charlas técnicas en espacios abiertos. El Dépor decidió crear tres grupos para realizar estas actividades a lo largo del día.
El Deportivo se unió para entrenar de manera definitiva el 26 de mayo y Fernando Vázquez, junto a su cuerpo técnico,separó a la plantilla en dos grupos y preparó dobles sesiones de entreno para que sus jugadores llegasen con el mejor tono posible al nuevo arranque de la competición programado para mediados de junio.