«Si el míster (Fernando Vázquez) decide no convocarme, tengo que estar preparado para ese cambio de chip con el Fabril”. Eso era lo que decía Adri Castro (1998) en la entrevista con Riazor.org hace poco más de un mes, y lo está cumpliendo. Pese a entrenar a diario con el primer equipo y haber sido convocado hasta en cinco ocasiones sin llegar a debutar, el delantero coruñés no ha bajado los brazos: encadena ya tres jornadas consecutivas marcando con el filial, aumentando cada día su aportación al equipo.
Tras haber jugado en las jornadas 4 y 5 sin haber ni entrenado a las órdenes de Juan Carlos Valerón, el ex del Ourense CF ha tenido en las últimas dos semanas más continuidad con el Fabril y ha demostrado ser un jugador diferencial para Tercera División. Titular ante Vista Alegre Estudiantil, Fisterra y Viveiro, ha marcado contra los tres equipos y además anotando el goles muy importantes: en los dos primeros empató cuando su equipo iba perdiendo y el pasado sábado abrió la lata en la primera mitad.
Los números de Adri Castro con el Fabril:
Partidos jugados: 5
Minutos: 450
Goles: 3
Asistencias: 1
Buena sociedad con Rayco y Javi Sánchez
En el último partido frente al Viveiro, Adri mostró ya un buen encaje con el resto de sus compañeros de ataque, algo que quedó especialmente patente en los goles: el suyo llegó tras un taconazo de Rayco (1997) y después fue el canario quien se aprovechó de un pase a placer del coruñés.
Valerón: «Es una pena que Rayco no pueda alternar primer equipo y Fabril por edad»
Y es que según acumula minutos con el Fabril, va a más su entendimiento tanto con Rayco como con Javi Sánchez (1996), los extremos más habituales de Juan Carlos Valerón. En las primeras apariciones de Adri Castro, que llegaron sin ni siquiera haber entrenado con el filial, la sociedad entre los tres atacantes no terminó de fluir pero sus movimientos cada vez están más coordinados y se reparten mejor los espacios. Además, Adri está siendo clave en la presión adelantada del Fabril, pues su sacrificio sin la pelota ha ayudado a que los blanquiazules sean capaces de recuperar la pelota más arriba.