Es el turno del Almería en ‘Adelante’. El club llega a Riazor con la candidatura al ascenso ya presentada. Lucas Alcaraz es ahora el dueño de un banquillo en el que permanece la huella de Unai Emery. Por quinto año consecutivo, ambos equipos se verán las caras.
El Almería llega a Riazor con la intención de volver a ganar un partido tras dos encuentros en los que no ha conseguido llevarse los tres puntos. Con Ulloa en estado de gracia, intentarán poner contra las cuerdas a la floja defensa blanquiazul. Oltra deberá mejorar el posicionamiento defensivo si no quiere sufrir contra los rojiblancos y contra el resto de equipos ‘grandes’.
El ‘míster’. Lucas Alcaraz. Fútbol ideal para la categoría.
El granadino es uno de los técnicos más veteranos de la categoría con 17 años de entrenador profesional a sus espaldas a pesar de tener tan solo 45 primaveras. Reconocido en toda España, todavía no ha conseguido entrenar a un grande y su carrera se distingue por tener los mismos éxitos que fracasos. Este curso busca su tercer ascenso a Primera División, que se sumaría a los anteriores con Recreativo de Huelva y Real Murcia.
Su idea, y la que se le ha transmitido al Almería, es la de realizar un fútbol muy característico de la categoría de plata. Con un planteamiento similar al de Miguel Ángel Lotina, ha hecho que su equipo solo haya recibido 11 tantos hasta el momento -el tercero menos goleado de Segunda- gracias a cuidar el trabajo defensivo por encima de todo. Los hombres de calidad con los que cuenta en la zona de ataque hacen que los almerienses rentabilicen la mayoría de las ocasiones de las que gozan y, sin hacer un gran fútbol, su estilo práctico les ha servido para estar en los puestos de cabeza.
Alcaraz es un entrenador con mucho oficio. Sin duda apostará por tapar a Valerón y esperar a convertir en gol cualquier oportunidad. El Deportivo no deberá cometer ningún error porque, de empezar el encuentro por detrás, será muy complicado remontar.
El ‘crack’. Leo Ulloa. El gol como obsesión.
El delantero argentino es uno de los más peligrosos de la Liga Adelante y ha comenzado la temporada de la misma manera que acabó la pasada en Primera División: marcando. En plena lucha por el pichichi -es segundo por detrás de Joselu-, sus nueve goles en trece enfrentamientos demuestran su potencial a la hora de finalizar de todas las maneras, aunque sobre todo destacan sus potentes remates de cabeza. Acompañado normalmente por Soriano y por Aleix, carga con casi todo el peligro de los almerienses. Con sus desmarques e inteligencia será un quebradero de cabeza para la zaga herculina.
El dato. Difícil ganarles. Los almerienses solo han perdido dos encuentros hasta el momento.
El Almería es, junto al Valladolid, el conjunto que menos partidos ha perdido de toda la Liga Adelante. Sus dos derrotas demuestran la solidez defensiva de los de Alcaraz a los que es muy complicado hacer gol -solo han recibido 11 y son el tercer conjunto menos goleado de Segunda División-. Los de Oltra deberán estar más acertados que nunca si quieren recortar distancias con un rival directo.
Un momento histórico. 26 de agosto de 2007. Entrar por la puerta grande.
La UD Almería, fundada en 1989 ascendió a Primera División en 2007. Con la ilusión de un novato se plantó en Riazor -un coliseo que pocos años antes era frecuente en la Champions League- para debutar en la máxima categoría del fútbol nacional, con un prometedor Unai Emery en el banquillo y jugadores sobre el césped de la talla de Felipe Melo, Negredo o Crusat. No pudo ser más brillante el comienzo del conjunto andaluz en Primera: un 0-3 con el que vencía por KO a un Deportivo en el que Miguel Ángel Lotina se estrenaba en el banquillo. Así comenzó la primera temporada del Almería en Primera, en la que fue, sin duda, el equipo revelación: finalizó 8º. Tan solo tres años después conseguiría otro de los grandes éxitos de su corta historia, también a costa del Deportivo, accediendo a semifinales de la Copa del Rey, donde cayó ante el imponente Barcelona de Pep Guardiola.
Una leyenda. Unai Emery. El hombre que dibujó el sueño.
La historia del Almería cambió el día que el humilde y desconocido entrenador del Lorca decidió aceptar su propuesta. Con el conjunto murciano había exprimido un año y medio de una forma espectacular: cogió el equipo 10º en 2ªB, lo ascendió e incluso ‘rozó’ el ascenso a Primera tras quedar en 5º. Sus dos años en Almería no fueron menos asombrosos. Con un juego ‘de pizarra’ basado en el orden, y caracterizado por sus peculiares métodos de motivación, el técnico vasco logró el ascenso a la primera, y en su segunda campaña, logró un histórico 8º puesto en la máxima categoría. Fueron, casi sin discusión, las dos campañas más exitosas del Almería. El banquillo del Almería se le quedó pequeño, y el Valencia llamó a su puerta. Pero la herencia ya la había dejado.
Una curiosidad. El club de los mil nombres. Desde el Football Club a la Unión Deportiva.
Aunque el club actual se fundó en 1989, la historia del fútbol almeriense habla de múltiples equipos, que han cambiado de nombre varias veces. En 1909 se fundan, casi simultáneamente, el Almería Football Club y el Almería Sporting Club. Mantienen una fuerte rivalidad en los primeros años, pero siempre a nivel local, y cuatro años más tarde, se une el Almería Athletic Club. El Sporting Club busca metas más altas, y consigue llamar la atención de los aficionados al fútbol con el fichaje de Ricardo Zamora, pero no tarda mucho en quebrarse el proyecto y el club desaparece. Durante las décadas siguientes se vuelven a fundar varios equipos que buscan unificar el fútbol almeriense. Es el caso de la Unión Deportiva Almeriense, el Recreativo de Almería, el Atlético Almería, la Agrupación Deportiva Almería y el Club Polideportivo Almería. Pero todos los proyecto, más tarde o más temprano, acaban evaporándose, a menudo por problemas económicos. Solo sobrevive el Club Polideportivo cuando, en 1989, se crea el Almería Club de Fútbol. Pero en 2001 desaparece el primero, y el Almería CF ya unifica, por fín, el fútbol de la ciudad y se rebautiza como Unión Deportiva Almería.