El presidente aprovechó la presentación de Fernando Vázquez como nuevo entrenador para repasar la totalidad de asuntos que rodean la actualidad blanquiazul.
Pablo Antelo – Jorge García | A Coruña
Augusto César Lendoiro apeló por enésima vez a la «unidad» de todo el deportivismo, trató de aclarar ante los medios de comunicación cuál es la situación real de la entidad herculina, e hizo especial hincapié en todo lo acontecido a nivel deportivo en las últimas jornadas.
En relación al ya ex-entrenador Domingos Paciência, quiso destacar el trabajo realizado por el luso y agradeció el esfuerzo aportado tanto por él como por sus colaboradores. «Hay que agradecerle lo que ha hecho y la forma de la que se ha ido. No es una casualidad que la plantilla estuviese ilusionada con el trabajo que había realizado hasta el momento», verbalizó.
La rueda de prensa se elevó de tono en el momento en el que fue preguntado por la posible división del vestuario y la falta de unidad para sacar la situación adelante. «En el vestuario no está ocurriendo nada. Hay unidad absoluta en el vestuario, ni de un país ni del otro, todos juegan al mismo fútbol y todos están unidísimos. Insto a la prensa a que no dude de esa situación, primero porque es la realidad. Si fuese otra, no me atrevería a hablar de la forma que estoy hablando», aclaró.
Insistió en la importancia de luchar todo el deportivismo unido hasta el final, y expuso que un Deportivo en la máxima categoría del fútbol español es bueno para todos los que trabajan alrededor del club coruñés.»Nos estamos jugando mucho. No es lo mismo un Deportivo en Primera División que un Deportivo en Segunda. No hay que inventar cosas ni hacer filtraciones interesadas«, manifestó.
Tampoco evitó hablar sobre la supuesta fractura en la relación entre Juan Carlos Valerón y el máximo dirigente, algo que para el mandatario es totalmente falso. «Es mentira que la relación de Valerón con el presidente está deteriorada. Valerón, con el Deportivo, con la plantilla y con los medios, su comportamiento y su entrega, tanto de él como de los capitanes, ha sido excepcional. No podemos abrir un melón que no existe», afirmó.
Quiso también aprovechar la comparecencia para quitarle hierro a los gritos del pasado sábado de una gran parte de la grada que pedían la dimisión del propio dirigente de Corcubión. «El mundo del fútbol es como es. Yo estoy convencido de que el presidente es el presidente de las derrotas, no el de las victorias. El día de las victorias, suele ser el goleador o la persona al frente del equipo«, aseguró.
Pidió a la afición hacer cierto ejercicio de madurez a la hora de encajar las derrotas, y en ese aspecto, expuso su apoyo a los jóvenes seguidores blanquiazules y avanzó que los abonados sub-25 verán aumentado el tramo de edad hasta los 30 años. «Hay jóvenes que tienen un mérito enorme en las victorias pero que tienen que acostumbrarse a tener mérito en las derrotas. Son el futuro del Deportivo, por eso adelantamos ya que el sub-25 va a ser el sub-30«, expuso.
Por último, quiso enviar a la parroquia deportivista un mensaje de optimismo, reiterando que confía en el nivel y en la calidad de la plantilla y cree que la situación todavía puede ser revertida. «Tenemos cuatro o cinco jugadores que están en la preselección de Portugal. Estoy convencido de que tenemos una plantilla para salvarnos. El equipo tiene equipo para salvarse, esa es la realidad. Igual que tuvimos una mala primera vuelta, ¿por qué no vamos a tener una buena segunda vuelta?», analizó.