El ya ex técnico deportivista ha querido dedicar sus últimas palabras a la hinchada deportivista y destacar que se marcha con la satisfacción del deber cumplido, ya que en su opinión la situación actual “no es irreversible”.
Visiblemente emocionado y agradecido por el trato recibió tras año y medio en el Real Club Deportivo de La Coruña, José Luis Oltra ofreció esta mañana su última rueda de prensa como entrenador del club herculino. El valenciano incidió en que la finalidad de la convocatoria era para despedirse de la afición, a la que está muy agradecido por el apoyo recibido. “Si yo hablo de récords y de números, será todo cuestionable, pero todos estamos de acuerdo en que el Dépor tiene un activo muy grande en la afición”, a la que definió como uno de los dos pilares básicos y que “solo ha dado lecciones de deportivismo desde que yo llegué aquí, incluso antes”. El mensaje de Oltra al aficionado ha sido claro: “Que sigan siendo igual de ejemplares que hasta ahora”.
Entre las sensaciones que invaden al ex entrenador deportivista está la de la “satisfacción del deber cumplido”. Oltra reconoce haber “tomado decisiones erróneas”, pero siempre “por el bien” del equipo. “Me he dejado hasta la última gota de mi sudor. Esto es la vida, a veces sonríe y a veces te da golpes”, admitió. Eso sí, ha querido desear “toda la suerte del mundo” a su sustituto y hacer una confesión: “Mi corazón va a ser siempre del Deportivo, eso está claro”.
Aún así, su destitución le parece “una decisión sorprendente porque no estamos en una situación irreversible, pero eso es opinable. Lo que no es opinable es que el equipo es colista y que estamos a una victoria de salir”. No ha querido dar muchos detalles de su conversación de ayer con el presidente Augusto César Lendoiro, pero admitió que cuando el miércoles se da cuenta de que no tiene que ir a Abegondo a entrenar, es que ya había decisiones tomadas. “No quiero entrar más en las formas ni en el fondo, no me queda más que respetalo”, matizó. Lo que sí le sorprende es que hace una semana estuvieron hablando el director deportivo y él de cosas referentes al equipo y a la plantilla.
El preparador valenciano sacó a relucir su lado más sentimental. “Me gusta mucho mi profesión, pero yo sufro más por mi familia y mis hijos”. Reconoce que el peor trago lo pasó ayer cuando le comunicó a los suyos su destitución, que “reaccionaron bien y me dieron mucha fuerza”. Otro momento duro para Oltra fue el momento de comunicárselo a sus jugadores, de los que pidió poder despedirse. “Les he dicho que lo siento”, admitió con semblante serio. Aunque entiende que forma parte de esta profesión, espera que “no sea la última vez que me cesen, porque querrá decir que estoy diez años más entrenando”.
Agradecido por el apoyo recibido
José Luis Oltra se lleva mucho de A Coruña. Aún no sabe si permanecerá en la ciudad hasta junio o se irá antes. “He vivido muy a gusto aquí y he estado encantado”, asegura. “Es un club que vale la pena”.
El ex entrenador blanquiazul no vaciló a la hora de decir que con él hubieran conseguido el objetivo de la permanencia. “Estaba convencido de que lo íbamos a lograr”. Ahora, con el nuevo entrenador, “espero y deseo que se logre” porque este grupo es “espectacular y muy fácil de llevar”.
Reconoce que “ha sido dura” la charla con los futbolistas. “Siempre les doy la palabra después para que aporten, corrijan… pero hoy les he dicho que quería hablar desde el sentimiento y que no hubiera ese feedback porque no quería que me mostraran lo que sentían. Solo me he despedido yo”, confesó.