El enfrentamiento ante el Espanyol será un partido marcado por el reencuentro de dos exdeportivistas con su antiguo equipo, Sergio González y Diego Colotto.
Cuando uno habla de Sergio González, es difícil no recordar inmediatamente tiempos mejores para el Deportivo. Como mediocentro, el catalán formó parte de uno de los mejores Dépor de la historia y fue protagonista de uno de los grandes partidos de la historia del club coruñés, marcando un gol en la final de Copa del Rey que más tarde pasaría a conocerse como el “Centenariazo”. Ahora, 12 años después, el catalán se enfrentará a un equipo que nada tiene que ver con aquel que asustaba en España y Europa hace más de una década.
El actual entrenador del Espanyol llegó a A Coruña en 2001 procedente, precisamente, del club al que ahora dirige. Su fichaje supuso el mayor desembolso de la historia del equipo gallego hasta la fecha con 16,83 millones de euros. Poco a poco, el de L’Hospitalet de Llobregat fue convirtiéndose en uno de los hombres importantes del conjunto herculino, siendo hasta ahora el quinto jugador que más partido de Primera División ha jugado con la camiseta blanquiazul con 294, solo superado por Fran (435), Mauro Silva (369), Manuel Pablo (341) y Donato (303).
No obstante, su salida del club gallego en 2010 estuvo cargada de polémica e incluso el centrocampista decidió denunciar al Deportivo por una serie de impagos. Como jugador deportivista, el catalán ha coincidido con varios de los futbolistas que hoy integran la primera plantilla del Dépor. Es el caso de Manuel Pablo, Alberto Lopo, Fabricio, Juan Domínguez, Laure y Diego Seoane, que ahora volverán a ver a Sergio González, aunque esta vez como entrenador del equipo rival.
Diego Colotto también se enfrentará a su exequipo
Otro de los jugadores que coincidieron con Sergio González en su época como deportivista fue Diego Colotto. Sin embargo, el argentino no tendrá que enfrentarse al internacional español, sino que estará a las órdenes del mismo. El central espanyolista aterrizó en A Coruña en 2008 procedente del Atlas mexicano y permaneció en el club gallego hasta 2012.
Durante sus temporadas en Riazor, el ahora zaguero del Espanyol se convirtió en uno de los ídolos de la afición. Con la zamarra blanquiazul, el defensa sufrió un descenso, aunque solo un año más tarde consiguió con el resto de sus compañeros devolver a los herculinos a Primera División. Sin embargo, el argentino decidió que su etapa como deportivista había llegado a su fin e hizo las maletas rumbo a Barcelona. El domingo, el central se enfrentará al que fue su equipo durante cuatro campañas, no obstante, no será la primera vez que lo haga y es que ya lo hizo en el último año del Deportivo en la Liga BBVA. Un 2-0 para los pericos en Cornellà-El Prat y un 2-0 favorable a los gallegos en Riazor son los resultados que se dieron en ambos partidos.