El Dépor quiere lamerse las heridas ante un Málaga que llega de dar el campanazo en Liga al superar al Barcelona de Luis Enrique. Eso sí, las estadísticas no juegan muy a favor del equipo de Pepe Mel cuando tiene que enfrentarse a un equipo que ha logrado superar al cuadro blaugrana. Aunque el sábado la necesidad de puntuar se ha convertido en imperiosa si el fin de Liga aspira a ser tranquilo.
Así las cosas, el Málaga llega con tres bajas para intentar el asalto de Riazor. La próxima semana será operado Juanpi, que se perderá lo que resta de temporada. Peñaranda, que venía de entrar en los planes de Míchel se ha lesionado y tampoco estará en la convocatoria, igual que un Miguel Torres que no ha terminado de ponerse a punto.
Contó Míchel con 20 futbolistas de campo y tres porteros para el entrenamiento del jueves, donde el trabajo con el balón fue el protagonista. La novedad podría ser En-Nesyri, quien parece haberse recuperado de una entrada sufrida en un partido con Marruecos.
El aviso de Míchel a su plantilla
Aunque el Málaga prácticamente haya conseguido salvar la temporada, Míchel no quiere que nadie se relaje. «Tenemos que jugar ante el Deportivo como si aún estuviésemos en peligro«, espetó en rueda de prensa. «Los jugadores no me engañan, ya sé lo que pueden dar de sí, así que se anden con cuidado», explicó en referencia al cambio que han mostrado en las últimas jornadas.
En cuanto al Deportivo, resaltó que es «un equipo que estaba en dificultades más por resultados que por el juego. Mejoró, aunque parece que de nuevo están en una dinámica más negativa«.