Miguel Lorenzo, senador coruñés del Partido Popular, acusó directamente a Irene Lozano de mantener silencio cómplice con Javier Tebas en el ‘caso Fuenlabrada’. La presidenta del CSD se defendió de esas acusaciones argumentando que el senador tiene una «imaginación muy fecunda».
Durante la Comisión de Cultura y Deportes de la Cámara Alta, Miguel Lorenzo aprovechó su turno de palabra para preguntarle directamente a Irene Lozano sobre el ‘caso Fuenlabrada’. Concretamente, sobre los motivos por los que no se consideró la propuesta de la RFEF de disputar una liga de 24 equipos en Segunda División.
Miguel Lorenzo, añadió que «a la reunión final en la que el CSD tiene que actuar como árbitro y buscar una solución que no perjudicase a nadie envían al señor Arístegui, del que no pongo en duda su honorabilidad ni digo si eso es legal o ético, pero lo que está claro es que lo estético no lo han tenido en cuenta». Y añadió que «nosotros, los coruñeses, exigimos una explicación”.
Tras la primera petición de Miguel Lorenzo, Irene Lozano respondió con un “¿usted es senador por Galicia?” ¿Por A Coruña? Cuando habla de solución razonable coincide con la geografía”. En su alegato añadió que «ha hecho usted un relato muy extenso, muy impreciso. Me ha dicho que iba a explicar lo que ocurrió, pero ha cometido muchas imprecisiones que soy incapaz de volver a reproducir. El CSD se ha ido pronunciando en su momento. Se pusieron todos los procedimientos, tanto deportivos dentro de nuestro marco de competencia, como sanitarios». Además, acusó al senador de tener una «imaginación muy fecunda».
De hecho, en un primer momento, Irene Lozano le acusó de poner en duda la honorabilidad de un funcionario público. Con lo que Miguel Lorenzo tuvo que reformular su pregunta. «Ustedes han estado mes y medio en silencio, no hicieron nada. La esencia era saber el motivo por el que el CSD no aceptó la propuesta federativa de ampliación y también aclarar porqué no tuvo una actuación más activa moderando el conflicto».
Añadió que «tras el comunicado usted mantuvo un mes y medio de silencio, un silencio cómplice del señor Tebas. Es más, que no le parezca mal, que está muy susceptible. Se decía que ese pacto, el de Viana, que pone Javier Tebas 200 millones de euros sobre la mesa para el deporte, tenían miedo que se perdiera», finalizó.
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