El mes de enero toca a su fin y con él hará lo propio el mercado invernal, un período de fichajes que ha deparado múltiples movimientos entre los equipos que militan en la Liga Santander y que aún se espera que traiga consigo un buen puñado de novedades más antes de la medianoche de mañana miércoles día 31. Como ya suele ser habitual, el Deportivo es uno de los conjuntos que encara estas últimas horas con varios frentes abiertos. Uno de ellos está en lograr la incorporación de un mediocentro defensivo con el que corregir las carencias de la actual plantilla en esa posición, pero sobre todo encontrar acomodo o la forma de dar salida a varios futbolistas.
En la actualidad el Deportivo tiene las 25 fichas ocupadas, y ello sin tener en cuenta la última incorporación de Michael Krohn-Dehli. Para que el danés pueda ser inscrito el club herculino tendrá que dar de baja al menos a uno de los jugadores en nómina, una circunstancia que se vería agravada en caso de que fructifiquen las negociaciones para la llegada de un mediocentro. Ante este panorama la directiva deberá redoblar sus esfuerzos para reactivar la operación salida y más aún siendo conscientes de la necesidad de liberar masa salarial para no incumplir las limitaciones fijadas por LaLiga en esa materia.
Hasta el momento han sido dos los jugadores que han abandonado A Coruña en los últimos meses, Alejandro Arribas, quien puso rumbo al fútbol mexicano tras constatar que no gozaba de la confianza de Cristóbal Parralo, y Saúl García, cedido al Numancia hasta final de temporada. La lista de futbolistas que podrían seguir sus pasos y poner fin a su etapa con la camiseta blanquiazul en las próximas horas es amplia, hasta el punto de que no se descarta la posibilidad de que se produzca la salida de algún jugador de peso dentro de la plantilla, pero hay cuatro que figuran en todas las quinielas; Przemyslaw Tyton, Costel Pantilimon, Gerard Valentín y Bruno Gama.
Con la llegada de Koval el Deportivo cuenta en la actualidad con cuatro guardametas en nómina, por lo que el papel tanto de Tyton como de Pantilimon de aquí a final de campeonato se presume meramente testimonial. En el caso del rumano una de las opciones que se barajan es la de poner fin a su cesión y que retorne a las filas del Watford. Más dificultades presenta la situación de Tyton. El polaco tiene contrato hasta junio de 2019 y una ficha sensiblemente superior a la del rumano por lo que cualquier acuerdo para una rescisión del mismo pasaría por hacer frente a un importante desembolso económico para las arcas de la entidad herculina. A su favor juega el hecho de que cualquier opción de que el portero esté presente en el próximo Mundial de Rusia pasa por jugar con regularidad en lo que queda de temporada, de ahí que se esté trabajando para encontrar un equipo que le brinde esa posibilidad y que en caso de aparecer encontraría todo tipo de facilidades por parte del equipo presidido por Tino Fernández.
Bruno Gama es otro de los que cuenta con muchas papeletas para no continuar en A Coruña. El rendimiento del portugués no ha sido ni mucho menos el esperado, hasta el punto de desempeñar un papel residual y ser uno de los habituales descartes en las convocatorias. El hecho de terminar contrato este verano hace que gane enteros la opción de que club y jugador lleguen a un entendimiento para la rescisión del mismo. Un caso similar es el de Gerard Valentín quien tampoco ha gozado apenas de oportunidades y ha visto como se le complica aún más el horizonte con la incorporación de Eneko Bóveda. La edad del lateral catalán unido a su asequible ficha y buen cartel en la Liga 1|2|3 hacen que en su caso se trabaje en buscarle un equipo en el que recalar en calidad de cedido.
En la recámara figuran otros nombres cuya salida parece menos probable aunque ni mucho menos descartada, como por ejemplo Borja Valle o el díscolo Emre Çolak. Aunque no ha contado con demasiados minutos, el berciano es un futbolista del agrado del técnico blanquiazul debido a su comportamiento ejemplar y buena predisposición al trabajo, todo lo contrario que el mediapunta turco. El acto de indisciplina protagonizado la semana pasada durante un entrenamiento y que acabó con el otomano expulsado del mismo parece haber agotado la paciencia de un Cristóbal que vería con buenos ojos una salida que además podría suponer un importante ingreso económico con el que afrontar en mejores condiciones la contratación del anhelado “5” que apuntale la medular.