Juan Emmanuel Culio, Pablo Insua, Juan Domínguez, Wilk o la preparación previa al partido, temas de interés en el análisis de la primera victoria de la temporada en Riazor.
1. Por fin. El Deportivo consiguió sus 3 primeros puntos de la temporada en Riazor en el que fue, probablemente, el peor partido de los de Fernando Vázquez en lo que va de temporada. El Dépor no mereció ganar ante el Alcorcón, pero tampoco perder contra el Córdoba o el Murcia. La balanza se equilibró ayer.
2. El Dépor no estuvo bien, le costó elaborar en los últimos metros y en ocasiones fue muy blando en defensa. Vázquez fue claro en la sala de prensa: el problema estuvo en el cansancio físico y en la mala preparación durante la semana. Nada tuvieron que ver las informaciones sobre elecciones presidenciales de los últimos días. «Lo niego absolutamente», dijo el de Castrofeito en rueda de prensa.
3. Lo escribí en la crónica y lo repito aquí en el análisis. El de ayer fue el triunfo de la cantera. Esta nueva generación que lideran Juan Domínguez, Álex Bergantiños y Pablo Insua ya saben lo que es ganar en Riazor tras dos partidos sufriendo graves reveses. Antes lo hacían en Abegondo, y ahora lo hacen en un ruedo que hace menos de una década albergaba partidos de Champions League. Olé.
4. Juan Domínguez es, probablemente, el mejor jugador del Deportivo y quién sabe si también lo es de la Segunda División. Roba, crea, equilibra y llega arriba con peligro. El gol es el fruto de su evolución en los últimos años. Se lo merece.
5. Si Domínguez es el líder del centro del campo, Pablo Insua se está afianzando como el cabecilla de la defensa. Junto a él tiene al incombustible Álex Bergantiños, al que le da igual cuándo, dónde y cómo; él roba, lucha y brega. ¿Había dudas de que lo haría?
6. Me gustó Cezary Wilk tras varios partidos sin verle nada destacable. Su dinamismo esta vez fue aprovechado por el conjunto blanquiazul y, curiosamente, fue a partir de la única acción en la que no estuvo bien, un cruce al que acudió con excesiva fragilidad y que permitió a Óscar Plano disparar fácil desde área pequeña. A partir de entonces, se mostró seguro y con personalidad.
7. El que no está nada bien es Emmanuel Culio. Es de los buenos del equipo, nadie lo duda, pero últimamente no está bien. Además, su carácter cohibe a los demás jugadores, que se sienten en la necesidad de devolverle la pelota en cada acción y ofrecerle el liderazgo que comienzan a asumir ellos. Es necesario que encuentre su lugar.
8. Teníamos ganas de verlo y allí estuvo presente. Empezó en el banquillo, animando a los más jóvenes, empapándoles de su experiencia y riéndose con ellos. De hecho, se permitió el lujo de tirarle un caño a ‘Bicho’ en el rondito. Volvió Marchena y todos se pusieron firmes.