El Dépor Femenino cerró de manera brillante un año 2018 que dejó sensaciones contrapuestas. La decepción de no haber logrado el ascenso se cura con el crecimiento exponencial que ha sufrido el equipo dentro del club y de la propia ciudad junto con la gran victoria en Oviedo en la última jornada liguera.
Hace tres años nacía este proyecto que tiene como objetivo ascender a la máxima categoría del fútbol femenino. Lejos de tirar la casa por la ventana a través de fichajes desorbitados, el proyecto siempre se ha basado en potenciar el fútbol femenino gallego desde la base. A pesar de seguir en segunda división, el equipo mejora con el paso de las temporadas y ese ansiado ascenso podría llegar en este 2019.
La última victoria en Oviedo por un gol a tres constata que las jugadoras de Manu Sánchez han ganado en experiencia a la hora de afrontar este tipo de encuentros. En una liga en la que ambos conjuntos son muy superiores al resto, los enfrentamientos entre ambos resultan muy importantes. Sin embargo, año tras año el nivel general va aumentando y el Dépor inició la competición cediendo un empate ante el Fríol. Esa derrota le ha venido bien al equipo a medio plazo tal y como reconocía su capitana Miriam en esta entrevista concedida hace unos días.
El próximo 13 de enero comienza la segunda vuelta y el Dépor Femenino tiene otras trece jornadas por delante para terminar la temporada en primera posición. Ahora mismo lidera la competición con tres puntos de ventaja ante el Oviedo. Las chicas de Manu Sánchez recibirán al conjunto ovetense el fin de semana del 21 de abril e intentará hacer con el título por primera vez en su historia.
La apuesta del Deportivo para este 2019 es clara y no es otra que el ascenso. Sin duda se trataría de un premio más que merecido para un grupo que trabaja sin descanso para lograr ese objetivo.
