Un partido de sanción para Alberto Quiles y una multa económica para el Celta. Sin complicaciones. Sin más ánimo que el de cubrir expediente. Así ha zanjado el Juez de Competición todo lo ocurrido el pasado domingo en Balaídos durante y, sobre todo, después del Celta B vs Deportivo que terminó con derrota blanquiazul por 2-1.
Con el acta arbitral y las imágenes que dieron la vuelta a toda España, desde el organismo se ha considerado oportuno sancionar con una «multa al club» por faltar al Artículo 86 del Código Disciplinario de la Real Federación Española de Fútbol: «Los clubes que incumplan los deberes propios de la organización de los partidos y los que son necesarios para su normal desarrollo, serán sancionados con multa en cuantía de 602 a 3.006 euros o, según la trascendencia del hecho, con clausura total de sus
instalaciones deportivas de uno a tres encuentros«. En ningún momento se especifica la cuantía de la multa más allá de esa horquilla recogida en el CD.
Sin perdón para Quiles
El Juez de Competición también confirmó que no habrá perdón para Alberto Quiles. El delantero del Deportivo tendrá que cumplir un partido de sanción por la doble amarilla y consecuente expulsión ante el Celta B. En este caso se ha desestimado el recurso del club blanquiazul y ni siquiera ha habido respuesta pública al mismo en la publicación de las sanciones.
Lo que sí queda sin ningún tipo de sanción es la tangana que se montó al final del encuentro. Alberola Rojas no quiso echar más leña al fuego y no recogió absolutamente nada de lo que pasó entre futbolistas de ambos equipos al final del encuentro. De esta forma, el Comité de Competición tampoco tenía base sobre la que sancionar al no entrar de oficio, salvo casos excepcionales, en este tipo de incidentes.