El Deportivo arrancó el año 2020 como aquel que pretende cumplir todos los propósitos que se plantea durante el año anterior. El mes de enero fue el mejor de todo el año para un club que sufrió multitud de cambios a todos los niveles.
El primero de ellos fue en los despachos. Paco Zas dejó su cargo a finales de 2019 y un Consejo de Administración provisional, liderado por Juan Antonio Armenteros, dirigió al club hasta el 14 de enero, cuando Fernando Vidal tomó posesión de su cargo como nuevo Presidente del Deportivo. A Vidal se le unió Richard Barral para encargarse de la parcela deportiva en el mercado invernal.
Barral dio un vuelco a la plantilla para buscar la salvación
Richard Barral revolucionó la plantilla con ocho fichajes y seis salidas. Dejaron el club Lampropoulos y Borja Galán, ambos cedidos; también salieron Samuele Longo, Koke Vegas, Sasa Jovanovic y Beto da Silva.
En el capítulo de llegadas, despertó especial ilusión en la afición la vuelta al club de Emre Çolak, junto al que también llegaron Claudio Beauvue, Sabin Merino, Keko Gontán, Uche Agbo, Hugo Vallejo y Aleksandar Jovanovic.
Fernando Vázquez, recién llegado a final de año, se encontró con un Dépor que había conseguido ganar un partido después de veinte jornadas llenas de decepciones. Aquel encuentro contra el Tenerife, todavía con Luis César en el banquillo, fue la primera piedra de una racha que parecía imposible en ese momento.
El primer destino de la nueva etapa de Fernando Vázquez en el Dépor fue Soria. Una gélida mañana de reyes en la que el Deportivo luchó como si le fuese la vida en ello, y es que le iba, y consiguió los tres puntos gracias a un balón suelto que Michele Somma colocó dentro de la portería numantina.
Pasadas las festividades navideñas llegó el turno de la Copa del Rey. Tras derrotar al Illueca llegó turno de visitar un rival de esta temporada en Segunda B, Unionistas de Salamanca. Ambos equipos empataron a 1-1 y fueron los salmantinos los que se llevaron el pase en la lotería de los penaltis.
La locura de Emre frente al Racing
Volvió el fútbol a Riazor y también volvió Emre Çolak. El turco fue el protagonista de la victoria por 2-1 a uno frente al Racing de Santander en un duelo entre los dos últimos de la clasificación. Los cántabros se adelantaron en el marcador gracias a un gol de Cejudo a los 14 minutos. Tan solo quince después salió Çolak al terreno al césped y solo dos minutos después el Dépor empató con gol de Sabin Merino. La locura llegó mediada la segunda parte. Emre engatilló un balón desde la frontal del área y adelantó al Dépor en el marcador y fue expulsado por doble amarilla por celebrar el gol celebrar el gol con la afición. Pese a todo, el Deportivo ganó y se llevó la tercera victoria consecutiva en liga.
Llegó el Cádiz, líder del campeonato en ese momento, pero al Dépor le daba igual. Sabin Merino volvió a marcar y los coruñeses siguieron sumando de a tres. Fernando Vázquez había conseguido recomponer a un equipo hecho pedazos y ponerlo de nuevo en la lucha por la salvación.
El Deportivo se presentó en Albacete para la jornada 24 de Segunda División como vigésimo clasificado con 24 puntos, cuatro por debajo de su rival de aquella tarde. Apareció de nuevo Sabin Merino, por tercera jornada consecutiva, para darle la victoria al Dépor en el Carlos Belmonte y cerrar, probablemente, un mes que nadie alcanzaba a soñar.
